Subcontratación desarrollo de software ERP

Beneficios frente a un departamento interno

En el entorno empresarial actual, las empresas necesitan software ERP personalizado para optimizar sus procesos internos, mejorar la eficiencia operativa y mantenerse competitivas. A la hora de desarrollar estos sistemas, surge una decisión estratégica clave: ¿es mejor crear un equipo interno o subcontratar a una consultora especializada? A continuación, se exploran los beneficios de la subcontratación y las limitaciones que suelen surgir con un departamento de desarrollo propio. 

Ahorro de costos

Una de las ventajas más claras de subcontratar el desarrollo de un ERP es el ahorro en costos. Crear un equipo interno implica invertir en salarios, infraestructura, herramientas y formación, además de gastos adicionales en la retención y actualización del talento. A largo plazo, estos costos fijos pueden resultar muy elevados.

Acceso a talento especializado y actualizado

Las consultoras especializadas no solo cuentan con desarrolladores altamente capacitados, sino que además incluyen expertos en áreas clave para el éxito de un ERP, como contabilidad, fiscalidad, gestión de calidad, comercio exterior, etc. Este conocimiento multidisciplinario es esencial para garantizar que el ERP no solo sea técnicamente sólido, sino que también esté alineado con las normativas, las mejores prácticas del sector y las necesidades operativas de la empresa.

Además, las consultoras suelen tener un acceso más amplio a talento de alta calidad, ya que las empresas tecnológicas son más atractivas para los profesionales del sector de IT. Esto se debe a que los desarrolladores y especialistas en tecnología prefieren trabajar en organizaciones donde el núcleo del negocio es la tecnología, ya que allí pueden crecer profesionalmente, enfrentar desafíos más complejos y mantenerse actualizados con las últimas tendencias del mercado. En este sentido, las consultoras pueden atraer y reclutar perfiles profesionales de mayor nivel, algo que a menudo es más difícil para las empresas no tecnológicas, cuyos equipos internos pueden tener más limitaciones en cuanto a desarrollo profesional y oportunidades tecnológicas.

Por otro lado, en equipos internos de empresas no tecnológicas, los perfiles técnicos pueden tener menos oportunidades de crecimiento y aprendizaje continuo, lo que puede resultar en un talento menos actualizado o especializado. Con una consultora, no solo se asegura un equipo de desarrollo robusto, sino también uno que esté siempre a la vanguardia de las últimas herramientas y metodologías.

Escalabilidad y flexibilidad

La subcontratación ofrece un alto grado de flexibilidad, permitiendo que el equipo asignado al proyecto se adapte rápidamente a las necesidades cambiantes. Las consultoras pueden escalar los recursos asignados en función de la fase del proyecto, lo que garantiza que no se pierda tiempo ni recursos. 

En contraste, un equipo interno de desarrollo tiene una capacidad limitada, y expandirlo conlleva costos y demoras. Además, contratar y formar a nuevos desarrolladores puede ser un proceso largo y costoso.

Reducción de riesgos y deuda técnica

Uno de los grandes riesgos al desarrollar software internamente es la acumulación de deuda técnica. Los equipos internos, bajo presión por cumplir con plazos y expectativas, a menudo priorizan soluciones rápidas y descuidan aspectos como la documentación, la calidad del código y el cumplimiento de estándares de diseño. Esto puede hacer que el software sea difícil de mantener y escalar a largo plazo.

Por otro lado, las consultoras siguen estándares de diseño, desarrollo y documentación rigurosos, lo que garantiza un código limpio, bien documentado y fácil de mantener. Además, muchas consultoras tienen procesos de calidad que aseguran que el software cumpla con las mejores prácticas de la industria, reduciendo el riesgo de problemas futuros.

Mitos sobre la propiedad del software

Un argumento común a favor del desarrollo interno es la propiedad total del software. Si bien esto puede ser cierto desde el punto de vista legal, no siempre resulta ventajoso. Desarrollar el software internamente implica también asumir toda la responsabilidad de su mantenimiento, actualización y escalabilidad. 

Además, la rotación de personal en empresas no tecnológicas suele ser alta, lo que pone en riesgo la continuidad de los proyectos. Cuando un desarrollador clave abandona la empresa, se pierde una parte crítica del conocimiento del software, lo que dificulta el mantenimiento y la evolución del ERP.

Las consultoras, por el contrario, no solo entregan un producto bien documentado y mantenible, sino que además suelen ofrecer acuerdos claros sobre la propiedad intelectual, donde el cliente conserva los derechos sobre el software, sin asumir los riesgos de una mala gestión técnica interna.

Acceso a recursos de grandes tecnológicas

Las consultoras, al estar relacionadas con grandes empresas tecnológicas como IBM, Microsoft, SAP, Oracle, entre otras, tienen acceso a recursos avanzados y exclusivos que estas compañías ofrecen a sus socios. Esto incluye herramientas de desarrollo, infraestructura cloud, soporte especializado y acceso a tecnologías punteras que no siempre están disponibles para equipos internos en empresas no tecnológicas.

Este acceso privilegiado a recursos tecnológicos es una gran ventaja competitiva, ya que permite a las consultoras ofrecer soluciones más eficientes, escalables y seguras, utilizando las últimas innovaciones del sector.

Actualización tecnológica constante

Uno de los mayores desafíos para los equipos internos de desarrollo en empresas no tecnológicas es mantenerse al día con las últimas tendencias y tecnologías. El ritmo de cambio en el mundo del desarrollo de software es rápido, y lo que hoy es una práctica estándar puede quedar obsoleto en pocos años. 

Los equipos internos, al no tener acceso constante a formación y recursos, tienden a resolver los problemas utilizando tecnologías que ya conocen, en lugar de explorar nuevas opciones que podrían ser más eficientes o adecuadas. Esto no solo limita la capacidad de innovación, sino que también puede hacer que el software se quede rápidamente anticuado.

Por el contrario, las consultoras están constantemente actualizadas, ya que necesitan estar al tanto de las últimas innovaciones para seguir siendo competitivas en el mercado. Esto garantiza que las soluciones que ofrecen no solo cumplen con los estándares actuales, sino que también están preparadas para el futuro.

Tiempo de implementación reducido

El tiempo es un factor clave en el éxito de cualquier proyecto de software. Crear un equipo interno desde cero para desarrollar un ERP no solo implica la contratación y formación de personal, sino también la gestión del proyecto y la curva de aprendizaje que conlleva. Esto puede llevar meses o incluso años, retrasando la implementación del sistema y los beneficios que puede aportar a la empresa.

En cambio, una consultora especializada tiene la capacidad de arrancar un proyecto de manera inmediata, gracias a su experiencia previa y a sus recursos. Esto reduce considerablemente los tiempos de desarrollo e implementación, permitiendo a la empresa comenzar a aprovechar su nuevo ERP en un plazo mucho más corto.

Conclusión

Si bien la idea de desarrollar un software ERP internamente puede parecer atractiva para algunas empresas por razones como el control o la propiedad, los desafíos y riesgos asociados suelen superar los beneficios percibidos. La subcontratación a una consultora especializada ofrece ventajas claras: ahorro de costos, acceso a expertos técnicos y funcionales, escalabilidad, reducción de riesgos y acceso a recursos de grandes tecnológicas.

Además, las consultoras siguen estándares rigurosos de desarrollo y documentación, lo que asegura que el software sea fácil de mantener y escalar a largo plazo. En última instancia, subcontratar el desarrollo de un ERP permite a las empresas concentrarse en su negocio principal mientras obtienen soluciones tecnológicas de alta calidad, sin asumir los riesgos y las complicaciones de gestionar un equipo interno.

Subcontratar no solo asegura un producto más eficiente y moderno, sino que también ofrece la tranquilidad de saber que el software ha sido desarrollado por expertos que entienden tanto la tecnología como los procesos de negocio clave.